jueves, 20 de noviembre de 2008

Lección 1

"Nada de lo que veo en esta habitación (en esta calle, desde esta ventana, en este lugar) significa nada."

1. Mira ahora lentamente a tu alrededor, y aplica esta idea de manera muy concreta a todo lo que veas:

Esa mesa no significa nada.
Esa silla no significa nada.
Esta mano no significa nada.
Este pie no significa nada.
Esta pluma no significa nada.


2. Luego mira más allá de lo que se encuentra inmediatamente alrededor tuyo, y aplica la idea dentro de un campo más amplio:

Esa puerta no significa nada.
Ese cuerpo no significa nada.
Esa lámpara no significa nada.
Ese letrero no significa nada.
Esa sombra no significa nada.


3. Observa que estas expresiones no siguen ningún orden determinado, ni hacen distinción entre la clase de cosas a las que se aplica. Ése es el propósito del ejercicio. La afirmación debe aplicarse sencillamente a cualquier cosa que veas. Al practicar con la idea del día, hazlo con total imparcialidad. No trates de aplicarla a todo lo que se encuentre dentro de tu campo visual, pues estos ejercicios no deben convertirse en un ritual. Asegúrate solamente de no excluir nada en particular. Desde el punto de vista de la aplicación de la idea, una cosa e igual que cualquier otra.
4. Las tres primeras lecciones no deben hacerse más de dos veces al día, preferiblemente una vez por la mañana y otra por la noche. No deben pasar de un minuto más o menos, a no ser que eso cause una sensación de premura. Una cómoda sensación de reposo en esencial.

Para quién fue creado este blog?

Este blog fue creado para todo aquello que lo quiera leer en principio. Estas lecciones fueron sacadas de un libro llamado "Un curso de Milagros", editado por "Foundation for inner Peace". Se recomienda hacer estas lecciones una por día, ya que son 365 en total. No se recomienda hacer dos lecciones en un día, pero si es posible permanecer en una lección el tiempo que se necesite.

Mi idea, es transmitirle solo las lecciones de este libro, a todo aquel que por diferentes motivos no pueda acceder a este hermoso libro. Por supuesto, yo lo recomiendo siempre para que ojalá el día de mañana, cada habitante de este mundo lo tenga en su hogar.

Ojalá que a todo aquel que lea estas líneas, les ayude tanto o más que a mí.